En 2012, poco después de la expropiación de YPF, filial de REPSOL, la Unión Europea impuso aranceles antidúmping a las importaciones del biocombustible provenientes de Argentina.
El país austral planteo una serie de reclamaciones contra dichas medidas ante la Organización Mundial del Comercio. España era el principal comprador de biodiésel argentino -que es elaborado en base al aceite de soja- hasta el 2012, cuando la UE impuso las referidas restricciones comerciales que Argentina consideró proteccionistas argumentando que solo buscaban blindar a la débil industria europea.
Ahora, la Organización Mundial de Comercio (OMC) ha fallado a favor del país sudamericano contra las medidas antidumping impuestas si bien, también dejó claro que la regulación de la UE que está en el corazón de la disputa, no viola sus normas. Sin embargo, todavía cabe la posibilidad de que la decisión sea apelada, por lo que la resolución a favor de Argentina no es aún definitiva.